Uno de los primeros proyectos representativos y de envergadura en los que participamos. Los trabajos se prolongaron durante tres años. Se trata de la rehabilitación de un edificio histórico que fue inaugurado en 1839 en la ciudad de Valencia y que en 1910 los arquitectos Alejandro Soler y Francisco Guardia culminan otorgándole un estilo racionalista que lo dota de espectacularidad. Destacan las cúpulas de hierro cristal y cerámica que nosotros mismos rehabilitamos artesanalmente en esta última intervención.